sábado, 26 de febrero de 2011

La vuelta al mundo en furgoneta.

Adoro, cuando las calles de mi ciudad se inundan de miles de puestos, de aromas, de colores, de sabores diferentes.
De rastas y copas de vino. De pintores y pintorescos.
Bufones, Piratas.
Adoro, la filosofía de recorrer el mundo haciendo lo que te gusta.

Sonrío.
¿Cómo has encendido las velas?
- Si te digo que es magia, ¿me creerás?
No. Vuelvo a sonreir.
- Si de verdad no me quieres creer y estás dispuesta a hacer que la magia desaparezca, dale la vuelta a la que más te guste.
Sonrío.
-Ves, ya no es tan mágico como creias.
-Siempre digo que es mágia, al menos así, saco sonrisas como esa.
Además, los nudos son gratis :). Llévate una piedra de recuerdo.


Recuerdos de un mercado medieval.

1 comentario:

  1. Qué alegría, Marta.
    Tenemos telepatía y...qué alegría, qué a-le-grí-a me da siempre verte.
    A partir de ahora...también por aquí, sonriéndole a tus pececitos.
    Casualmente, también yo siento como tú esa forma de dar la vuelta al mundo en furgoneta, con todo lo que describes...de principio a fin ;)

    ResponderEliminar